Utilizar aceite esencial de laurel aporta sorprendentes bondades para la salud y se puede elaborar en la comodidad del hogar, combinándolo con otros ingredientes. En este artículo te enseñaremos cómo prepararlo.
¿Qué es el laurel?
El laurel (Laurus nobilis) procede de la zona del mar Mediterráneo, lugar en el que crece de forma silvestre; posee hoja perenne y vistosa.
Fue utilizado en tiempos antiguos por el Egipto helenístico, Grecia, la República Romana y su posteriormente poderoso Imperio como símbolo de inequívoca distinción para gloria de sus gobernantes, así como para los líderes militares cuando obtenían resonantes victorias. De esta costumbre proceden las frases “coronado/a de laureles”, “llevarse los laureles” y palabras como “laureado/a”.
¿Qué usos tiene el laurel?
Como condimento, se encuentra entre los más utilizados dentro de la cocina mediterránea, por sus propiedades diuréticas, estimulantes del apetito y astringentes.
También se utiliza como repelente natural de insectos por sus cantidades significativas de ácido láurico.
Como medicamento, es muy celebrado por sus propiedades antioxidantes y anticancerígenas. También es un excelente anti flatulento.
Componentes activos presentes en el laurel.
Las hojas de laurel contienen eucaliptol, compuesto de uso difundido en la elaboración de fármacos; también contienen cineol y eugenol, auxiliares para una buena digestión, además de ser antiácidos.
Asimismo, poseen vitamina A, vitamina B2 (riboflavina), vitamina B3 (niacina), vitamina B9 (ácido fólico), vitamina B6 y vitamina C.
Por si no fuese suficiente, el laurel es una importante fuente de hierro, calcio, potasio, magnesio, fósforo, selenio y zinc.
El aceite de laurel: usos y propiedades
Este oleoso elemento se obtiene de las hojas frescas del árbol. Se presenta como un líquido de tonalidad amarilla, con una fragancia intensa y picante, semejante a la del aceite de clavo.
Se le conoce por ser muy buen antiséptico, bactericida, antiinflamatorio y expectorante; se recomienda ampliamente para tratar dolencias y enfermedades respiratorias como la gripe, la bronquitis o la faringitis.
Se utiliza frecuentemente para la elaboración de perfumes destinados principalmente al público masculino, en virtud de su intenso aroma. Como cosmético, se le emplea en la fabricación de cremas y geles de afeitar, ya que tonifica la piel luego del afeitado, así como en el tratamiento del acné.
Entre sus propiedades tenemos que fomenta la relajación muscular, por su contenido de eucaliptol; al diluir el aceite esencial de laurel en un buen aceite portador se obtiene un buen aceite para masajes y al agregarlo directamente al agua de la tina, se consigue un medio para combatir la tensión, los espasmos y el dolor muscular.
También actúa como analgésico; quienes padecen de dolores de cabeza o migraña tienen la opción de utilizarlo aplicándolo mediante masaje sobre las áreas afectadas, produciendo un sorprendente y eficaz alivio. Puede utilizarse como antipirético para bajar la fiebre producida por las gripes y los resfriados, aplicándolo como pomada sobre el pecho.
Aunado a lo anterior, el aceite esencial de laurel es un gran antibiótico, al inhibir el crecimiento y la proliferación de microbios, hongos y bacterias. Se puede utilizar para la desinfección de lesiones, contusiones y heridas leves, quemaduras superficiales, úlceras y abscesos. En forma tópica, ayuda en la regeneración epidérmica y en el tratamiento de afecciones cutáneas producidas por hongos, por lo que se aconseja para tratar el acné. Aplicado sobre el cabello, sea directamente o mezclado con champú, ayuda a proteger el cuero cabelludo y a tratar la alopecia, la caspa y la seborrea.
Un detalle muy importante del aceite esencial de laurel es que su uso no se contraindica en forma alguna.
Está visto que son amplias las propiedades de este aceite esencial de laurel; sin embargo, paradójicamente, es el menos conocido entre los aceites esenciales.
A continuación, te ofrecemos una serie de instrucciones para que elabores tu propio aceite esencial de laurel.
Ingredientes para elaborar aceite esencial casero de laurel
Necesitarás para su elaboración 15 gr de hojas de laurel, 200 gr de aceite de almendras dulces y 1 recipiente de vidrio de 200 ml.
Ahora bien ¿Cómo debes proceder para elaborarlo?
En primer lugar, te recomendamos armarte de paciencia porque, ya que termines de prepararlo, debes esperar por cuarenta días: el aceite esencial debe macerar para que pueda ser usado, de modo que se aprovechen al máximo todas sus propiedades curativas. Hecha esta observación, pasemos a la elaboración del aceite.
Antes que todo, limpia escrupulosamente el recipiente de vidrio; de preferencia, esterilízalo. Limpia también las hojas de laurel para quitarle cualquier rastro de polvo o de elementos procedentes de otras plantas. Después coloca las hojas en el interior del recipiente de vidrio y luego echa el aceite de almendras dulces. No es necesario que agites el recipiente para mezclar los ingredientes; basta con que cierres el recipiente de forma hermética.
Pasados los 40 días de espera, utiliza el aceite.