El aceite de geranio se cuenta entre las esencias de aromaterapia y cosmética con mayor uso, en virtud de su amplia diversidad de propiedades con grandes beneficios tanto físicos como mentales. ¿Te llama la atención elaborar en la comodidad de tu casa el aceite esencial de geranio? Si es así, te invitamos a seguir leyendo este artículo y te recomendamos que tomes nota de cuantos pasos a seguir veas aquí para que los aproveches al máximo.
¿Qué son los geranios?
Estos son plantas de ornamentación externa. Poseen flores de colores muy vivos que brotan en la época veraniega y tienen mucha resistencia. Se les cultiva generalmente en jardines, terrazas o balcones, aunque se les puede conservar en ambientes interiores, en tanto se les ubique en un sitio iluminado sin concentración de calor.
¿Existen varias clases de geranios?
Ciertamente hay una gran variedad de ellos y se descubren nuevas especies anualmente. Entre las más conocidas se cuentan: el común, la gitanilla u “hojas de hiedra”, que es colgante; el pelargonio de pensamiento, excelente para cultivo en interiores y los de hojas aromáticas.
¿Qué beneficios trae el uso del geranio para el organismo?
El geranio posee propiedades como analgésico, reductor del estrés, estimulante del sistema endocrino, antiinflamatorio, digestivo inmunofortalecedor, antiséptico, antibacterial y antimicótico.
Además, ayuda a hacer funcionar debidamente los riñones, fortaleciendo la salud renal y estimulando la micción, lo cual coadyuva en la reducción de la tensión renal e inhibiendo la transferencia de toxinas a otras áreas del organismo.
El aceite de geranio y sus beneficios.
Con relación al aceite esencial de geranio, el tema que nos interesa, entre los diversos bienes que produce para el organismo se destacan el del control de las ansiedades y el tratamiento de dolencias cutáneas como el acné o las cicatrices. No sólo beneficia al cuerpo por ser natural, sino que también tiene su ventaja económica y es por ello que se destaca como elemento principal para diferentes tratamientos.
El aceite esencial de geranio está compuesto por citronelol, un agente antiséptico y antibacteriano; geraniol, con poder calmante y antioxidante; formiato de citronelilo, nerol, linalool e isomentona. Estos compuestos hacen del aceite esencial de geranio un potente antibacteriano, utilizado para desinfectar heridas y reducir la aparición del acné, mitigando sus síntomas.
También es un buen anticelulítico, pues estimula la circulación sanguínea, eliminando los problemas de las piernas producidos por la mala circulación o bien por la retención de líquidos. De igual manera, ayuda a desinflamar, aliviando las inflamaciones tanto externas como internas en forma rápida y eficaz, con la consecuente reducción del dolor y de la irritación; por ello se le recomienda ampliamente para combatir las inflamaciones relacionadas con eczemas y psoriasis.
Al nutrir la piel, favoreciendo su regeneración celular, lo hace apropiado para prevenir el envejecimiento natural y la consecuente aparición de arrugas. Por ello es un muy buen antioxidante. También ayuda a reafirmar la piel madura y estriada; esta propiedad se incrementa cuando el aceite de geranio se combina con otros ingredientes que persiguen este mismo propósito. Aunado a todo lo anterior, como astringente controla la producción y el contenido de grasa en la piel en virtud de su acción directa sobre las glándulas sebáceas, redundando en mayor salud para la piel, mayor suavidad, resistencia y flexibilidad.
Modo de elaborar tu propio aceite esencial de geranio en tu casa.
¿Qué necesitas para esto? Toma nota:
Dos tazas de hojas frescas de geranio, aceite de jojoba, un mortero, recipientes de vidrio con su respectiva tapa y un colador de malla fina.
Pasos a seguir
Primero lava muy bien con agua fría las hojas de geranio, para retirar suciedades, plaga o restos de materia vegetal. Luego sécalas, con papel absorbente o una toalla, sin frotarlas. Después ponlas en el mortero y tritúralas hasta extraer la pulpa, dejándolas reposar por 5 minutos.
Coloca las hojas junto con la pulpa en un recipiente de vidrio debidamente limpio y seco; agrega el aceite de jojoba de modo que cubra el geranio por completo. Después cierra el recipiente y almacénalo por 2 semanas en un sitio fresco y libre de luz.
Transcurrido este tiempo, verifica cuán listo está el aroma; si el aroma no es intenso, agrega hojas de geranio y pon a reposar todo por una semana más; pero si es sumamente penetrante, agrega más aceite de jojoba como diluyente para rebajar su fuerza. Una vez listo, separa el aceite de las hojas con un colador, tratando de obtener todo el líquido posible; vacíalo en recipientes de vidrio, valiéndote de un gotero u otro instrumento similar. Luego pon los recipientes en un sitio fresco, libre de humedad y alejado de la luz solar.
Elaborar aceite esencial de geranio en casa es muy fácil y la espera bien vale el esfuerzo.