Siendo los mejores amigos del hombre, es una verdadera alegría cuando uno de estos animalitos entra en nuestra vida, sin importar si son grandes o pequeños, su amor es siempre incondicional, y están allí en las buenas y en las malas, sintiendo también nuestro dolor interno, y celebrando nuestras alegrías.
Pero de momentos se puede volver un tanto complicado, sobre cuando a estos no se les enseñan modales, y si bien está en su instinto ser animales, estos pueden ser adiestrados para poder comportarse de una forma específica al estar en la casa, en el parque, rodeado de personas, o incluso al estar cerca de un bebe.
La educación es primordial
Así como para los humanos la educación es la muestra de que se es civilizado, para los perros ese concepto es en realidad muy parecido, ya que según sea el entrenamiento de un perro, este podrá estar en más lugares sin preocupar a las personas que le rodean, al mismo tiempo podrá comportarse bien en casa y no causará destrozos.
Es necesario considerar que mientras más joven sea el perro, más fácil será su adiestramiento, y menos tiempo se tendrá que vivir con una mascota revoltosa, pero esto no es limitante, ya que los perros de edad más avanzada también pueden ser adiestrados y el entrenamiento se imparte con firmeza y cariño (los perros no responden bien a los entrenamientos agresivos).
Como adiestrar a un perro
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Conocer al perro y determinar su comportamiento
Algo que se debe tener en cuenta es que no todos los perros son iguales, estos tienen sus propias personalidades y pueden responder de forma diferente a las distintas órdenes. Lo recomendable es utilizar trucos y formas de captar la atención del animal, y enfocarlo en la realización del entrenamiento familiar.
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Implicar a toda la familia
Cuando solo un miembro de la familia participa en el adiestramiento del perro, este tiende a responder las órdenes de una sola persona, y a comportarse diferente con los demás. Por esa razón es imperativo que cada miembro de la familia, desde el más joven al más anciano sea parte del proceso de enseñanza.
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Mantener las ordenes simples
Seamos honestos, por muy brillantes que creamos que son nuestros perros, y en realidad algunos pueden ser muy inteligentes, siguen siendo perros, por lo que al menos, las primeras órdenes que éste debe aprender han de ser muy básicas, para que comience a responder bien ante estas.
En otras palabras, lo que se desea es comunicar claramente una acción al utilizar solo una palabra que no sea complicada de pronunciar. Órdenes como “alto”, “camina”, “sentado”, “abajo”, “arriba”, y demás órdenes simples son básicas y muy fáciles de aprender. Luego de que aprenda estas, se le puede enseñar incluso a buscar una botella de agua del refrigerador.
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Los juegos son premios
Jugar con un perro puede ser visto como un premio si el juego se realiza luego de que este hace una sesión de entrenamiento exitosa. Al jugar con la mascota, esta crea un vínculo directo entre una orden que debe cumplir, y una gratificación que recibirá luego de realizar dicha orden de forma correcta.
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No abusar de los premio
El uso de golosinas y premios es en realidad una gran manera de motivar cierto comportamiento en un perro, al hacerle entender que comportarse de cierta forma es algo bueno, sin embargo, estos no se pueden utilizar a cada momento, por lo que se recomienda darle una golosina luego de 5 ejercicios correctos.
Utilizar halagos para reforzar los premios que se ofrecen también es buena idea, decirle “buen chico” con voz cariñosa luego de que ha hecho algo bien, estimula también al perro para seguir comportándose igual en el futuro.
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Reprimirle correctamente
Hablarle en un tono severo o no darle una golosina es una forma correcta de reprimenda, mientras que privarle de hacer sus necesidades básicas se puede considerar como tortura animal. Así como tampoco se recomienda dejarle encadenado
La reprimenda debe ser realizada en el momento, para que la vincule con una mala acción que no debe ser realizada después, de lo contrario, la reprimenda no tendría en efecto deseado.
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Utilizar un tono severo
A la hora de aplicar una reprimenda, el tono de voz debe ser severo, y expresando molestia, mas no se le debe agredir físicamente, gritarle o insultarle, ya que estos cuando se encuentran bajo ese tipo de presión pueden reaccionar y atacar a quien les agrede.
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Horario fijo
Se debe tratar de realizar las sesiones a una hora específica del día, dejando ciertos descansos entre los ejercicios, sobre todo si estos implican esfuerzo físico.
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Tiempo libre
Todo pero necesita un lugar para estar solo, con algún juguete, o simplemente para estar a su propio ritmo. Por ende se aconseja habilitar un área especial para este.