Tradicionalmente, las chimeneas son utilizadas como centro principal en las reuniones familiares, sobre todo en la época navideña, ya que brinda un ambiente acogedor en el que se pueden compartir grandes momentos inolvidables. Sin embargo, a pesar de que no todas las casas cuentan con una, ese no es un pretexto para que no se puedan hacer con materiales fáciles de obtener.
Resumen
TogglePasos para realizar una chimenea de cartón fácil
Las chimeneas de cartón son manualidades que se utilizan para darle un aspecto diferente a la casa sobre todo en la época navideña pero, estas se pueden diseñar para utilizarlas en cualquier época del año y darle un toque familiar, íntimo y natural al hogar.
A continuación, se procederá a mencionar los materiales a utilizar y se explicará cada uno de los pasos que se deben seguir para elaborar una chimenea de cartón fácil y rápido de hacer en casa.
Entre los materiales que se van a utilizar tenemos:
- Cajas de cartón grandes (pueden ser recicladas). La cantidad dependerá del tamaño de la chimenea que se quiera
- Tres o cuatro pielgos de papel bond blanco
- Rectángulos de papel o cartulina de color rojo o marrón de ocho por veinticinco centímetros para simular los ladrillos
- Lápiz adhesivo
- Silicón caliente
- Pintura acrílica de color blanca, marrón, negra y café
- Papel celofán rojo
- Luces led de baterías
El procedimiento a realizar es el siguiente:
Como primer paso se debe seleccionar el lugar de la casa en donde se ubicará la chimenea que se va a realizar. Una vez que se tenga el lugar seleccionado se procede a formar la estructura de la chimenea acomodando las cajas de cartón de acuerdo al modelo que se desea realizar, si es necesario se cortan con un cúter para adaptarlas hasta lograr la forma que se desee.
Por ejemplo, una de las formas de organizar las cajas podría ser cortando una de las cajas por la mitad para simular la base y la parte superior de la chimenea. De igual forma, se puede cortar otra caja por la mitad para formar los costados de la misma. Y por último se cortan un rectángulo de cartón pequeño para unir las los costados y darle una mejor forma a la chimenea.
Es importante destacar que existen muchas formas de acomodar las cajas para formar la chimenea, sin embargo, estas dependen del espacio de la casa con el que se cuente, la cantidad de cajas que se tenga y el tamaño en el que se desee hacer la chimenea.
Como segundo paso, una vez que se haya seleccionado la estructura que se desea hacer, se procede a pintar la base con pinturas de color café o marrón y se le dibujan vetas o franjas negras. Por otra parte, las demás cajas se forraran con los pliegos del papel bond blanco.
Otra opción que se puede realizar es pintar las otras cajas de color blanco con pintura acrílica, sin embargo, esto demorará en secar más tiempo y se requerirá aplicarle dos o tres manos de pintura. Una ventaja de usar el papel bond es que este es económico y fácil de adquirir
Seguidamente, el tercer paso consiste en armar la chimenea pegando con silicón caliente cada una de las cajas en la posición correspondiente de acuerdo al diseño para darle más firmeza y que esta no se vaya a desarmar.
Una vez culminado el paso anterior, en el siguiente paso se procederá a pegar los ladrillos. Estos se deben ubicar con uno o dos centímetros de separación intercalando el acomodo de los rectángulos en cada línea para que se vea como un muro de verdad. Si es necesario se pueden utilizar de vez en cuando ladrillos más pequeños para cambiar el diseño y para cubrir superficies más pequeñas.
Posteriormente, el quinto paso consiste en ubicar un cartón del tamaño del fondo de la chimenea y pintarlo con pintura de color negro para dar la sensación de profundidad y que se ve más real.
Para la parte superior de la chimenea una alternativa es pintar la caja de color blanco, para darle un toque más atractivo y llamativo a la chimenea y que resalten los colores de los ladrillos, sin embargo, también se puede utilizar el mismo diseño de los ladrillos o pintarlo de color marrón.
Finalmente, se le puede agregar unas luces led con baterías cubiertas con un poco de papel celofán rojo para simular el fuego. Si no se cuenta con las luces de batería también pueden servir las tradicionales que se conectan a la corriente y se ubica la chimenea cerca de un interruptor de electricidad para dar el efecto ideal. Es importante recordar que estas luces no se calientan por lo tanto no existe riesgo de que se queme el papel.