Como fabricar pompones de lana

La pieza decorativa por excelencia cuando se refiere a textiles. Los pompones de lana no solo son suaves al tacto, sino que también resultan muy llamativos, siendo así el complemento perfecto para colocarlos en bolsos, atuendos, como llaveros, e incluso hay quienes van más allá y las utilizan como piezas de joyería para colocarlas en colgantes.

Piezas ancestrales

Las borlas y pompones de lana no son una novedad, de hecho, estas han sido usadas como pieza decorativa en muchas ocasiones a lo largo de los años, y son más que todo vistas en ropas invernales, ya que se creía que estas podían ayudar a retener el calor, sin embargo son más un accesorio visual y no práctico.

Pero esto no significa que deban ser pasadas por alto, de hecho, son perfectas para ser utilizadas tanto en ropa como en accesorios, generalmente destinados a las mujeres, los cuales pueden ser de mucho agrado, y funcionar como una especie de bola antiestrés, la cual se puede acariciar para liberar las frustraciones del día a día.

Como hacer pompones de lana fácilmente

Lo primero que se debe considerar al momento de realizar estos elementos son los materiales que se necesitan, los cuales son cepillos con cerdas abundantes, hilos de lana, tijeras, aguja, hilos de lana, una plancha para el pelo, y un soporte metálico o de cartón. Al tener listos los materiales y herramientas, se puede proceder.

  • Preparar el soporte

Dependiendo del tamaño del pompón, el soporte puede ser metálico, de cartón o incluso la misma lana. Si se trata de algo pequeño, el soporte puede ser metálico, si la borla o pompón será más grande el mismo ha de ser de cartón, o en su defecto, una gran bola de lana enrollada, dependiendo de lo que se necesite hacer.

Lo más normal en cuanto a tamaño es que estos tengan de 6 a 10 centímetros de diámetro. Si se desea hacer el más pequeño, se deberá tomar tiras de lana de 30cm cada una, más una de 2m de largo, esto para poder hacer un pompón grueso que sea cómodo al tacto.

  • Creación del pompón

Una vez que se tienen los materiales cortados, se procede a envolver el soporte con lana, hasta que el mismo quede cubierto, luego se toman una de las piezas de 30cm, y se coloca por debajo del hilo superior que se ha utilizado para darle vueltas al pompón. De esta forma dicha pieza de 30 cm queda colgando de lado y lado. 

Ese trozo de lana se toma para hacer un nudo a mitad del soporte, que permita comenzar a enrollarlo sobre sí mismo y luego hacer otro nudo, para fijar bien la lana colocada. Con la segunda pieza de 30cm se sigue dando vueltas, y se repite el proceso anterior, lo que hace que el pompón quede más grueso.

Posteriormente, se toma la borla y se corta una de las dos partes del embobinado de lana, el cual se mantendrá firme gracias a los nudos realizados previamente. De esta forma los hilos comienzan a colgar, y utilizando el cepillo los mismos se comienzan a desenredar, hasta que queden completamente sueltos.

Los mismos tendrán un aspecto un tanto desalineado, por lo que se toma la plancha para el cabello y se les da unas pasadas, para que el calor aplaque las fibras y quede más liso. Ministras más pasadas se dan con el cepillo y la plancha más uniforme se verá el pompón. Pero es necesario tener cuidado de no aplicar mucho calor, ya que este puede dañar la pieza.

Fibras naturales muy sintéticas

Se sabe que la lana es una fibra natural que se extrae de las ovejas. Dicha fibra es muy tupida, y resulta perfecta para hacer una gran cantidad de ropa y accesorios tejidos a mano, lo que resulta ser el perfecto remedio para la ansiedad, ya que permite a la persona relajarse y poner a volar su imaginación mientras crea su propio diseño.

Sin embargo, sí resulta un poco incómodo utilizar lana, se puede emplear fibras sintéticas, las cuales son una muy buena imitación de la lana, y permite obtener buenos acabados, aunque la sensación final al acariciar dichas fibras, no resulta tan placentera como con un pompón de lana real.

Pero son una buena opción cuando no se dispone de lana real, o cuando se tiene algo en contra de la forma en cómo se obtiene la lana, ya que muchos activistas dicen que retirar la lana de las ovejas es inhumano, pero en realidad estas necesitan que se les retire, para que no se les enferma la piel.

Hacer estos pompones requiere de concentración, ya que no son piezas fáciles que se puedan realizar con la mente descuidado, sino que requieren atención para que resulten hermosas, y puedan ser lucidas en cualquier atuendo.