Cómo estudiar en verano

Te han quedado materias pendientes y viene el verano, es una época que no es fácil para estudiar. Si te toca estudiar en verano, no te deprimas, es mucho sencillo de lo que parece con un poco de voluntad, las herramientas necesarias y con una buena planificación de tus horas de estudio podrás ponerte al día.

Consejos para estudiar en verano

Época de verano contiene varias ocasiones, más de lo que aparenta, el tener que estudiar en esta estación del año te puede ayudar conseguir algunos objetivos trazados. A continuación te mostraremos como lograr superar todos los obstáculos y a su vez estudiar en verano.

  1. Organiza tus tareas

Si vas a preparar una o más asignaturas, o solo un tema en específico, distribúyelos en las horas que vas a destinar a estudiar. No tienes que ser tan detallista, pero organiza, que días vas a estudiar, en qué horas te beneficia más. Es primordial que tengas el material necesario a la mano para así aprovechar al máximo las horas de estudio.

  1. Crea un horario de estudios

Es lo más importante, define las asignaturas que tienes que estudiar y distribúyelas en las horas que vas a dedicarle a estudiarlas y tus horas de descanso o diversión, puesto que estas en verano y necesitas descansar. Utiliza las horas más productivas del día y aprovéchalas para tu beneficio.

Utiliza cualquier herramienta para elaborar tu horario, resalta las horas de descanso. Así como también planifica la misma cantidad  de horas de estudio para cada día.  Debes ser responsable en cumplir ese horario.

  1. Ajústate al horario

Busca horas de estudio en que puedas aprovecharlas al máximo, en las mañanas que estas más fresco o finalizando las tardes son buenas horas debido a que hay menos calor. Ajusta el horario a tus actividades, para que sean lo más productivas.

  1. Planifica tus descansos

Por mucho que tengas que estudiar, es importante que descanses para mantener así un buen ritmo de estudio y logres retener toda la información. Puedes hacer bloques de estudio de  hora y media a dos horas y media, con descanso de 30 minutos. Usa ese tiempo para descansar, caminar o darte un premio si has logrado completar un objetivo.

  1. Busca un buen compañero

Todos tenemos a un buen compañero de clases, invítalo por lo menos uno o días a la semana para que te el estudiar un poco más agradable. Ten preparado algunas bebidas frías y algo de picar para los momentos de descanso y tener las fuerzas necesarias para aguantar las horas de estudio.

Si estudias con alguien, entre los dos pueden hacerse pregunta, hablar sobre el tema que estudian, pueden hacer fichas con lo más importante del tema. Planifica reunirte semanalmente y así ponerte a punto sobre lo que has estudiado, puedes incluir uno o dos amigos para hacer más dinámico y agradable el estudio, lo que te permitirá  crear debates en parejas.

  1. Un lugar cómodo

Elige estudiar en lugares cómodos, donde el calor no sea un factor que te distraiga y que tenga todo lo necesario para que concentres mejor. Pero tampoco te pongas tan cómodo, como estudiar en tu cama o cerca de la piscina donde  existen factores que te pueden distraer. En él estudio o en tu habitación si cuentas con un escritorio, son lugares ideales.

  1. Prepara tu familia

Infórmales a tus padres y hermanos de tu horario de estudio y la importancia que tiene para ti el poder lograr ponerte al día, así evitaras que te llamen o distraigan en esas horas. Del mismo modo trata de avisarle a tus contactos la hora en la que estudiarás y así no tendrás distracciones de tus contactos, con esto podrás tener tu celular a la mano sin que sea una distracción.

Por otra parte comunícale a tu pareja de tus horas de estudio, y así incluir tus visitas en las horas de descanso o días libres.

  1. Estudia en diferentes ambientes

Ya que estas en verano y tienes que estudiar, aprovecha esos días para salir a un parque y estudiar al aire libre, si has salido de vacaciones con tu familia busca un sitio agradable donde puedas estudiar. Siempre varia el sitio de estudio en cual sea agradable para cumplir con tus deberes y a la vez disfrutar del ambiente.

  1. Gratifica tu trabajo

Sabes que no es fácil estudiar en verano, pudiendo estar en la playa, en el cine o acampando con tus amigos. Para lograr mantenerte animado y con buena energía, puedes darte algunos premios cuando hayas finalizado algún objetivo planificado, o el haber terminado los ejercicios de matemáticas.

  1. No te sientas culpable

Que hayas reprobado alguna asignatura, no se podrá cambiar solo, tendrás que estudiar pero no por eso debe sentirte culpable. Aprovecha esta situación y que te ayude para hacer mejor un estudiante de ti y el próximo curso no tener que estudiar en verano.