La planta de caléndula es originaria del sur del continente europeo y es muy atractiva por sus propiedades medicinales y beneficiosas para el organismo. De ella se extrae un aceite sumamente útil para tratar efectivamente diversas dolencias. Si deseas conocer la forma de extraer este aceite en la comodidad de tu casa, lee el siguiente artículo y anota este método para lograrlo.
La planta de caléndula y su aceite.
Diversidad de tratamientos para combatir dolencias cutáneas como irritaciones, eccemas, dermatitis o quemaduras, entre muchas otras, se basan en el uso del aceite destilado de los pétalos de la Caléndula officinalis, que se puede adquirir sin problemas en cualquier tienda especializada o también puede elaborarse en casa fácilmente. Cuenta con propiedades bactericidas, antisépticas y antiinflamatorias, que lo incluyen entre los favoritos de las personas.
¿Qué caracteriza al aceite de caléndula?
Este producto oleoso posee ciertos detalles que lo caracterizan, entre los que pueden citarse:
- Su penetrante y no muy agradable aroma.
- Su color amarillo con tinte verdoso.
- Oleoso en consistencia y viscosidad.
- Con utilidad en la medicina, la cosmética y el campo alimenticio.
- Un excelente antioxidante y desinflamatorio.
- Estimulante para la circulación de la sangre.
¿Qué propiedades tiene el aceite de caléndula?
Aquí tienes una lista completa de las propiedades que posee el aceite obtenido de la flor de caléndula:
Como tónico: sirve como digestivo, calmante del dolor y de los nervios.
Como emenagogo y transpirante: estimula el flujo sanguíneo en el área de la pelvis y el útero, llegando a estimular también, en algunos casos, la menstruación y la secreción de sudor.
Como antiespasmódico: ayuda contra los calambres en el cuerpo, así como contra las contracturas y las convulsiones.
Como medicamento: posee un efecto antiinflamatorio formidable; es idóneo para curar venas varicosas y úlceras. Es muy utilizado para el alivio de la comezón, la inflamación y el dolor por afecciones cutáneas y, además, para combatir síntomas de alergias e infecciones. Como el aceite de caléndula también es un buen antiséptico con poder antimicrobiano, disminuye el tiempo que toma que las heridas y cortadas se cicatricen, especialmente aquellas cuya cicatrización se hace difícil. Para tratar picaduras de insectos también es muy bueno.
Como elemento cosmético: es muy bueno para la piel como agente para tratamiento y cuidado. Facilita el control del acné, la dermatitis, los eczemas, la psoriasis y otras dolencias cutáneas similares. Como hidrata la piel y la calma, es perfecto para tratar pieles secas o maltratadas y, por sus propiedades antimicóticas, es muy eficiente para los casos de pie de atleta y tiña.
Como antioxidante: fomenta la eliminación de los radicales libres, previene los síntomas de envejecimiento y algunas enfermedades relacionadas.
¿Qué beneficios trae el uso del aceite de caléndula para la salud corporal?
Es excelente como hidratante y calmante de la piel; la suaviza y le da un cuidado excelente, pues la desinflama, cicatriza las heridas y tiene función bactericida; controla el acné, los eczemas, la psoriasis y otros padecimientos similares. Ayuda a recuperar y rejuvenecer la piel, siendo un regenerador de las células verdaderamente efectivo, llegando incluso a sanar úlceras decúbitos, úlceras gástricas y venas varicosas. Sana las heridas difíciles de curar, así como los moretones y los esguinces. Es analgésico y combate los hongos; además, es muy bueno para combatir el estreñimiento y tratar los calambres abdominales, también mantiene a raya los efectos producidos por la gastritis.
¿Qué debes hacer para elaborar aceite de caléndula en tu casa?
Primeramente, debes tener a la mano 0,100 lt de aceite de oliva (o de almendras en su defecto) y varias flores de caléndula. Verifica que éstas no tengan ningún insecto u otro objeto extraño en su interior; para esto, colócalas boca abajo y sacúdelas suavemente para que cualquier insecto u objeto extraño que pueda estar dentro, caiga. Toma un recipiente de cristal previamente esterilizado y coloca las flores de caléndula dentro de él, agrega el aceite de oliva o de almendras al recipiente, lo suficiente para que cubra todas las flores; sólo debe cubrirlas. Luego procede a cerrar el recipiente y déjalo macerar; esto puedes hacerlo de dos formas: exponerlo a la luz solar por 15 días para que el calor lo macere o bien hacerlo en frío, guardando el frasco por 40 días en un sitio libre de luz y de humedad.
Un detalle a considerar: al macerarse en frío, las propiedades de la planta se conservan de mejor manera. Indudablemente es la mejor alternativa, excepto que tengas apresuramiento y se te dificulte esperar los 40 días para obtener un producto mucho mejor. Transcurrido el tiempo requerido para la maceración del aceite, retíralo del recipiente y cuélalo. Con eso, queda listo para utilizarlo cuando quieras.
Demostrado: es muy sencillo elaborar aceite de caléndula en casa y puedes aprovecharlo mucho.