Cómo cultivar y cuidar una guzmania
Si deseas cultivar una guzmania, aquí te enseñaremos a cómo hacerlo de la mejor manera para que puedas disfrutar de todos los beneficios que conlleva tener una guzmania en tu hogar. Quédate y sigue al pie de la letra esta guía de pasos para cuidar y sembrar una guzmania.
La guzmania es una hermosa planta que pertenece a la gran familia de las bromeliaceae, se distingue por sus hojas arqueadas y largas, con su peculiar verde intenso. Existen una gran cantidad de variedades de la guzmania como lo puede ser:
- Guzmania lingulata.
- Guzmania conífera.
- Guzmania lindenii.
- Guzmania zahnii.
- Guzmania monostachya.
- Guzmania musaica.
- Guzmania sanguínea.
- Guzmania berteroniana.
Pasos para cultivar la guzmania
- Lo primero que debemos hacer es buscar el lugar correcto para plantar nuestra guzmania. Ya que la guzmania no es una planta que requiera un cuidado con especial atención, tendremos que buscarle un lugar con buena iluminación, más no que el sol le dé directamente. Un truco para saber si nuestra planta está falta o sobrepasada de luz solar es el siguiente; Si las hojas de la planta están en un color verde muy claro, quiere decir que la luz solar está siendo demasiada, pero sí por lo contrario las hojas se encuentran demasiado oscura, quiere decir que la luz solar que está recibiendo es muy poca.
- La temperatura ideal para el desarrollo de nuestra planta son las que varían entre 15 y 20 grados centígrados, aunque puede llegar a soportar hasta un máximo de 27 grados centígrados sin que sufra algún tipo de daño. Hay que tener en cuenta que las caídas bruscas de temperatura pueden ser letales para ella, en especial si son menores de los 15°C
- Procura que exista una buena circulación de aire para nuestra planta, siempre y cuando el aire no sea frío.
- Si deseas limpiar las hojas de tu planta, puedes hacerlo con paño húmedo en agua, pero jamás lo hagas con abrillantadores.
- La guzmania es una planta acidófila, esto quiere decir que en cuanto al riego lo mejor es usar agua pluvial, regando de modo que el terreno se mantenga húmedo más no encharcado.
- La copa central de la guzmania debe mantenerse llena de agua, puedes hacerlo una vez cada quince días, para así prevenir sales, restos vegetales o animales que puedan quedarse dentro de la copa dañando la planta
- Si vas a plantar la guzmania en una maceta, es necesario que coloques un portamacetas; En este portamacetas puedes colocar bien sea grava o piedras, debido a que en el fondo de la maceta siempre deja un poco de agua, con la grava se evaporara esa agua restante, causando que nuestra planta se mantenga siempre húmeda.
- El terreno debe permitir que el agua del riego drene rápidamente, no debes usar una maceta demasiado grande porque traerá como consecuencia que el agua se quede un poco encharcada y no será lo más óptimo para nuestra planta. Por eso es recomendable usar macetas hechas de terracota ya que permite a la tierra respirar, es decir, permite que el agua se evapore.
- Trasplantamos la guzmania cuando notamos que la maceta se está quedando pequeña para mantener las raíces. Como ya se dijo es una planta acidófila, entonces será ideal que el terreno donde vamos a trasplantar a nuestra planta debe contener al menos turba, arena gruesa y perlita.
- Debemos abonar a la planta cada 15 días, este abono debe ser diluido en agua de riego. Es necesario que el abono que compres tenga algunos componentes como lo son el fósforo, potasio, nitrógeno, hierro, cobre, boro, entre otros. Con estos macro y micro elementos la planta tendrá un equilibrado desarrollo.
- La guzmania empezará a florecer en un estimado de dos años de edad, y esta lo hará en verano, esta irá acompañada por la formación de las brácteas características, y decorativas de la planta.
- Si ha pasado el tiempo de florecer, y usted está seguro de que ha aplicado todos los pasos correctos, podría estimularla de la siguiente manera. Introdúcela dentro de una bolsa plástica con una manzana madura, tendrá que esperar una semana. Y la manzana empezará a liberar una hormona vegetal que desencadenará una serie de reacciones químicas.
- La guzmania tiene la particularidad de que no necesita ser podada, pero deberás ir eliminando las hojas que se irán dañando poco a poco, de lo contrario provocará que estas hojas sean conductoras de enfermedades y parásitos que podrían matar a nuestro ejemplar.
Con esta guía de sencillos pasos ya estarás en capacidad de cultivar tu propia guzmania en la comodidad de tu hogar, para que llenes de color y vida tu jardín, y serás la envidia de todos tus vecinos.