Compraste una casa, rentaste o simplemente estás cansado de la actual decoración y consideras que ya es hora de un cambio, no te preocupes, con pequeñas ideas y muy poco dinero lograras cambiar el aspecto actual de tu hogar sin tener que recurrir a técnicos o profesionales de para conseguirlo.
Una técnica en desuso
Dispones de áreas así en tu hogar, esta es una forma de decorar ya por demás no usada, así que, si quieres impregnarle vida, llego el momento de hacerlo, no necesitaras de muchos utensilios para lograrlo y veras que tú mismo puedes darles un acabado profesional a tus paredes.
El gotelé es una técnica antigua que consistía en verter pintura bastante gruesa en una pared con un patrón más o menos parecido o de forma uniforme, el resultado era una pared “no lisa” con ciertas protuberancias que daban un aspecto rugoso y áspero, esta técnica no era aplicada en todas las paredes, generalmente la relación era una de cada cuatro.
Muy usada en centros corporativos o grandes fachadas era un indicativo de elegancia, en las entradas de los edificios podías apreciar esta técnica, en aquella época era una norma el tener este tipo de decoraciones, no ameritaba mayores mantenimientos y a todos parecía gustarles.
Tuvo tal nivel de éxito que empezaron a replicarlo en casas y departamentos, y en las fachadas de innumerables restaurantes era muy común ver este tipo de decoraciones en múltiples colores y degradados, pero ya paso de moda y es hora de cambiar, así que te explicaremos como de manera que sea una experiencia fácil para ti.
- Técnica sencilla
Lo primero es que necesitaras una serie de equipos que tendrás en tu baúl, esto funciona solo si la pared no está realizada con material plástico:
- Un par de guantes, pueden ser de carnaza o de tela gruesa
- Una espátula ancha
- Varias lijas gruesas (según la extensión de tu pared)
- Varias lijas finas
- Masilla o mezcla para superficies
- Trapos viejos para limpiar
- Lentes de seguridad
- Mascarilla filtrante para el polvo
Ya con las herramientas listas tomaras la espátula con los guantes puestos y procederás a raspar la pared totalmente dejándola lo más limpia posible de restos de pintura gruesa, al principio tendrás que realizar movimientos bruscos para raspar la pared ya que el gotelé se caracteriza tener superficies muy ásperas.
Poco a poco el material excedente ira cayendo al suelo, veras como la pared va alisando, aunque no estará totalmente lisa, si hay agujeros o grietas trata de sacar la suciedad o el polvillo que exista dentro de estas.
Si vez que remover el gotelé es muy difícil porque es demasiado duro puedes aplicarle agua con una manguera (solo si esta técnica no está realizada con pintura plástica), remójalo bastante y deja que el gotelé absorba la mayor cantidad de agua posible, esto ayudara a que ablande un poco y se te hará mas fácil el removerlo con la espátula.
- Gotelé plástico
Cuando la técnica es realizada con pintura plástica no podrás utilizar el agua, de nada serviría, en este caso deberemos agregar un par de herramientas más para poder lograr nuestro cometido, a la lista anterior solo agregaras una herramienta:
- Un martillo
Tomando en cuenta que es material plástico y es muchísimo más resistente, nos apoyaremos en el martillo para retirar los restos de la técnica anterior, en este caso tomaremos el martillo y la espátula, golpearemos suavemente con el martillo a la espátula fijada en la red, recuerda usar los implementos de seguridad que te pedimos en el listado anterior.
Poco a poco con el golpeteo del martillo veras como de la superficie se irán desprendiendo los restos de la pintura plástica, solo deberás tener un poco de paciencia, es normal que sientas cansancio en las manos, si la pared es muy extensa no intentes terminarla en un solo día, tus manos podrían presentar calambres por el esfuerzo repetitivo del golpeteo.
Veras que esta técnica de retirado y alisado de la pared es muy efectiva, aunque te generara algo de agotamiento.
- Retirado con herramienta eléctrica
Para los amantes de las herramientas eléctricas o si dispones de algunas de ellas, revisa en tu cuarto de herramientas a ver si tienes una lijadora orbital, o si deseas hacer el gasto puedes adquirir una lijadora de potencia para retirarlo, con esta herramienta lo has más fácil y rápido que nadie. ¡Nunca dejes de usar los implementos de seguridad!
Recuerda que no importa la técnica que utilices para retirarlo, siempre tendrás que revisar que la pared que estás trabajando quede con muy buena adherencia para aplicar nuevamente otra capa de masilla o de lo contrario el nuevo material que apliques para una nueva decoración podría no adherirse bieny caerse o pelarse la pared al cabo de poco tiempo.