Tener problemas con un enchufe en casa suele ser un escenario muy común, ya que si llegase suceder una subida de tensión los tomacorrientes pudiesen llegar a sufrir daños, por lo que necesitaran un cambio inmediato, lo que también se convierte en una buena oportunidad para actualizarlos, ya que estos no suelen tener un precio muy elevado.
Hacerlo por cuenta propia
Aunque parezca un trabajo complicado, este es en realidad muy simple, ya que solo se trata de utilizar un destornillador, para retirar la pieza antigua, armar la conexión nueva, y colocar el nuevo tomacorriente en su sitio. Este trabajo no solo ha de ser realizado cuando suceda un desperfecto sino que se recomienda actualizarlos cada 10 años.
De hecho, la recomendación es modificar la instalación eléctrica cada 10 años, el cual es un tiempo prudente para reemplazar los conectores y cables de una edificación, ya que con el tiempo estos se suelen deteriorar, claro que esto también depende de las condiciones climáticas, del lugar donde se esté.
Solicitarle a un electricista que acuda a realizar este trabajo generalmente implica un costo más alto que el del mismo tomacorriente, por lo que utilizando las herramientas correctas, los implementos de seguridad necesarios, y tomando las precauciones mínimas, se puede realizar el cambio de tomacorrientes por cuenta propia.
Pasos para cambiar un tomacorriente de forma segura
Para poder cambiar el enchufe, lo primero que se necesita hacer es adquirir el conector nuevo, el cual se puede conseguir en cualquier ferretería o tienda de bricolaje, y seguramente cumplirá con las características mínimas de seguridad. El mayor problema para esto será elegir el estilo de preferencia.
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Medidas de prevención
Siempre que se trabaja con electricidad es necesario tomar precauciones, ya que una descarga eléctrica puede paralizar el corazón, causando la muerte instantánea, y aunque la electricidad de una casa no posee la fuerza para matar de forma acelerada, si lo puede hacer después de unos 5 segundos entrando en contacto con la electricidad.
Por ende, las medidas de prevención que deben ser tomadas son el uso de guantes especiales para manipular electricidad, los cuales no deben ser conductores, las herramientas deben tener aislante en las agarraderas para no transmitir electricidad, usar botas o zapatos de goma sin partes metálicas, retirar los objetos metálicos del cuerpo, y eliminar la electricidad de esa parte de la casa utilizando el tablero central.
Otra recomendación es realizar los trabajos eléctricos de día, ya que de esta forma no se dependerá de linternas, velas, o fuentes eléctricas de luz para poder ver lo que se está haciendo.
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Retirar el enchufe a cambiar
Para realizar este procedimiento es necesario retirar los tornillos que sujetan el enchufe, así como retirar la tapa protectora. En ocasiones los tornillos se ven por fuera y son los que sujetan la tapa, mientras que en otras veces la tapa está colocada a presión, y puede ser retirada insertando una cuña en la parte trasera y ejerciendo palanca suavemente.
Luego de retirar la tapa, se desatornillan los anclajes que aseguran el enchufe a la pared, lo que permite mover el mismo enchufe con los cables aun colocados en él. Una vez que se realice este procedimiento, se procede a retirar los cables del enchufe antiguo, lo que se hace con mucho cuidado.
Generalmente los cables se encuentran dentro de unas aberturas, las cuales van hacia los contactos internos, y asegurados por unos tornillos más pequeños, los cuales hay que aflojar para poder retirar el tomacorriente. Una vez que se haya hecho esto, se sacan los cables y se puede colocar el enchufe nuevo.
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Instalar el nuevo tomacorrientes
Para la instalación se toma en nuevo enchufe sin su tapa protectora, los cables se colocan dentro de las aberturas respectivas, haciendo siempre énfasis en colocar los mismos cables de un lado o del otro, dependiendo de cómo estaban instalados originalmente.
Lo que nunca se debe hacer es colocar dos cables positivos en el mismo enchufe, a no ser que se trate de un circuito de mayor potencia (220V), por lo que siempre ha de haber un cable positivo, y otro negativo, de lo contrario, se puede incluso crear un incendio al conectar un equipo eléctrico.
Cuando se hayan instalado y asegurado los cables, se coloca el tomacorriente dentro del hueco en la pared, y se atornilla a los anclajes principales. Una vez que esté instalado correctamente, se procede a colocar la tapa protectora, tenga o no tornillos. Este proceso es muy fácil de hacer.
Por último, se vuelve a restaurar el paso de electricidad por esa parte de la edificación, y se conecta un equipo de baja potencia, y de preferencia de bajo valor también, para verificar que esté funcionando la conexión. Si el equipo funciona, significa que el trabajo se hizo correctamente.