El cuidado facial siempre ha sido un aspecto muy importante en la vida de las mujeres, y desde hace varios años también ha sido relevante dentro de la vida masculina, ya que el avance de la sociedad y la tecnología permite que cuidemos más nuestro rostro, eliminando ciertas impurezas y alisando cada superficie.
Importancia de una piel sana
Para poder entender la importancia de la aplicación de frío en la piel para cerrar los poros, es necesario entender que los poros son los conductos por los cuales es segregado el sudor, la grasa que genera la piel, y donde se almacena la suciedad proveniente del ambiente, y de las cosas que entran en contacto con nuestro rostro.
Bien dicen que la salud es sinónimo de belleza, y resulta que cuando el cuerpo se encuentra bien internamente, esto se refleja en su exterior, pero en algunos casos, a causa de las condiciones climáticas o el ambiente dentro del cual se vive, la piel puede verse afectada de manera negativa, lo que se traduce en un mal aspecto físico.
Afortunadamente existen diferentes métodos que pueden ser utilizadas para el cuidado de la piel, los cuales varían tanto en complejidad, costo, e incluso en eficacia. Pero todos se orientan hacia la misma dirección, eliminar la suciedad que adquiere el rostro, así como la grasa que genera, y cerrar los poros para que estos no sean conductos de suciedad que incluso puedan verse afectados.
Pasos para cerrar los poros con hielo
El hielo no es solo un elemento que funciona para mantener fría la comida y bebidas, sino que también es muy bueno para ayudar a mejorar la circulación de la sangre a nivel superficial, y ayuda en el control del acné, al reducir la inflamación de las zonas afectadas, por lo que ayuda en diversas formas a mantener una piel sana.
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Limpia tu rostro
Para poder comenzar con este simple tratamiento de belleza es necesario que la piel del rostro esté completamente limpia. Se prefiere que se utilice un jabón antiséptico, el cual pueda eliminar la grasa y dejar la piel tersa, así como humectada. Demás está decir que el maquillaje, las cremas y aceite que se puedan aplicar sobre el rostro deben ser completamente retiradas antes de la aplicación.
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Aplica un exfoliante
No es suficiente tener el rostro limpio de manera superficial, sino que hay que llegar a la raíz, y dicha raíz son los poros, por lo que es necesario utilizar un exfoliante que permita retirar las impurezas escondidas, así como la piel muerta que pueda existir.
Si no tienes un exfoliante profesional no es necesario desesperar, ya que se puede hacer uno muy fácilmente en casa y con ingredientes básicos. El más recomendable es el que se realiza con café molido y aceite de oliva. Este se aplica sobre el rostro y se realizan suaves movimientos circulares para eliminar todo rastro de suciedad.
Es necesario recordar que no se debe aplicar ningún exfoliante que contenga azúcar, ya que esta no limpia, sino que ayuda en la secreción y generación de grasa. Además, al no ser retirada correctamente esta se acumula en los poros y los bloquea, generando así un brote de acné.
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Aplica el hielo
Esta aplicación ha de ser realizada cuidadosamente. En primer lugar, el hielo no debe entrar en contacto directo con la piel, sino que debe estar envuelto en un algodón o un paño limpio, y una vez que este se empiece a derretir, y la fibra se haya humedecido, es momento de aplicarlo.
La forma de hacerlo es en movimientos circulares por toda la zona a tratar, o simplemente en todo el rostro si así se requiere. Esto se hace sin ejercer presión sobre la piel, la aplicación debe sentirse como una caricia.
Cuando hayas pasado el hielo por tu rostro durante 5 minutos, puede secar tu cara, y aplicar un tónico facial para que los poros permanezcan cerrados por más tiempo.
Precauciones
Si bien es cierto que aplicar hielo sobre la piel para cerrar los poros es altamente beneficioso, no toda clase de frío es bueno. Esto significa que se debe evitar el uso de cremas mentoladas sobre la cara de manera excesiva.
Lo que sucede cuando estas sustancias entran en contacto con tu rostro por un tiempo prolongado, es una irritación la cual no solo es molesta, sino que también resulta antiestética, y que puede empeorar si no es tratada correctamente.
Es necesario tener esta consideración cuando se aplican cremas en el rostro, ya que a muchas personas les gusta la sensación de frío que puede generar el mentol, pero es eso exactamente, sensación fría, más no es frío verdadero. Estas no van a cerrar los poros, sino que los impregnan con mentol, lo que resulta contraproducente.