El rostro es una de las partes más importantes del cuerpo, es como la portada de todas las personas, además de que es a donde todos nos miran normalmente cuando hablamos. Por ello mantenerlo limpio, cuidado y reluciente es indispensable. Un buen método para mantenerlo sano son las mascarillas de arcilla, si aun no sabes cómo se utilizan, te mencionamos todo sobre ellas a continuación.
Las mascarillas de arcilla
Rejuvenecer la piel es uno de las cosas que muchas médicos han estudiado por mucho tiempo, puesto que la idea de que esta luzca sana, reluciente y limpia como la de los bebes es un deseo de muchas personas. A pesar de que hay varios tratamientos que pueden ayudar con esto, no todos son efectivos.
La mascarilla de arcilla tiene un efecto potente sobre los tejidos de nuestro rostro, permiten acelerar el proceso de recuperación de la piel y además permite que esta pueda limpiarse de cualquier impureza que tenga. Si deseas aprender cómo utilizarla, entonces sigue nuestras indicaciones.
Paso a paso para aplicar arcilla en la cara
Primero que todo debes saber que la arcilla, se clasifica en según el tipo de composición que tenga, puesto que puede tratar diferentes tipos de piel. Por ejemplo: la de color verde y la blanca se recomiendan para rejuvenecer tejidos en pieles delicadas, mientras que el rojo es para eliminar impurezas y la negra es para tratar el acné. Dicho esto, te explicamos todo detalladamente paso a paso:
- Paso 1: primero que todo debes saber qué tipo de arcilla vas a utilizar y esto depende básicamente de las condiciones que tenga la tuya, por ello evalúala y determina para que la quieres utilizar realmente.
Nuestra recomendación es la siguiente: si tu piel está muy maltratada y descuidada usa la roja, sus efectos son más potentes, si tienes muchos granos usa la negra y finalmente si solo la quieres para mantenerla saludable usa la verde.
- Paso 2: ahora que ya has elegido un determinado tipo de arcilla, antes de aplicarla debemos hacer un paso previo, el cual consiste en que limpiemos nuestro rostro para que así todos los poros puedan asimilar sus propiedades.
Esto es bastante sencillo, simplemente usa abundante agua y jabón (preferiblemente que sea neutro) así sus propiedades limpiadoras serán más potentes, luego seca bien con un paño. Asegúrate de restregar bien para eliminar cualquier rastro de suciedad que haya.
Una recomendación que te daremos, es que hagas masajees suavemente las diferentes zonas de tu cara, de igual forma utiliza agua tibia para que así cada uno de los poros se puedan abrir.
- Paso 3: aplica sobre tu cara un producto exfoliante, así podrás limpiar mucho mejor la cara, restriega bien sobre tu rostro, sin aplicar mucha fuerza para que no te vayas a rasguñar, luego retíralo con agua.
- Paso 4: luego de toda esta preparación, oficialmente comenzaremos con la aplicación de la mascarilla, es bastante sencillo, solamente debemos extender el producto por toda nuestra cara, hasta que quede completamente cubierta.
Si deseas para poder aplicar la arcilla te recomendamos que utilices una espátula, es fácil de usar y lo mejor es que la podrás poder de una forma más sencilla. De igual forma, debes tener cuidado al momento de extenderla, de que no te vaya a caer en un ojo o en la boca, por eso ve haciéndolo con cuidado.
Un consejo que te damos es que no te limites a solo hacerlo en tu cara, también puedes aplicarlo encima de tu cuello, así este también se limpiara y eliminará todas las impurezas que tiene.
- Paso 5: en el momento que termines de aplicarlo, simplemente deja que este tratamiento haga efecto, para ello debes dejarlo actuar por aproximadamente unos 15 minutos.
Durante este tiempo, simplemente te puedes acostar boca arriba y esperar que el la arcilla haga su respectiva limpieza en la epidermis, procura no hacer movimientos bruscos para que esta no se vaya a caer.
Si deseas para que el tratamiento con arcilla no se te haga tan tedioso puedes acompañar el momento con unas velas aromáticas y una música de fondo, así harás como una especie de sesión de SPA.
- Paso 6: cuando el tiempo de tratamiento termine, entonces procederemos a retirar la mascarilla de nuestro rostro, para ello puedes utilizar bien sea una toalla o simplemente una esponja con un poco de agua tibia. Debes aplicarla con movimientos suaves y fuertes para que puedes retirar toda la arcilla.
En este paso debemos asegurarnos de quitar absolutamente todos los restos de arcilla, finalmente enjuágate la cara, si quieres puedes lavarla con jabón y al secártela con un paño seco, párate al frente de un espejo facial para que puedas ver los efectos rejuvenecedores que esta provoco.